¿Preocupado por tus deudas? No estás solo. Según el informe de Crédito al Consumidor G.19 de febrero de 2021 de la Reserva Federal, la deuda de los consumidores de EE. UU es de 4,2 billones de dólares aproximadamente. Si bien este total incluye deudas de tarjetas de crédito, préstamos educativos y préstamos para automóviles, no incluye préstamos inmobiliarios.

Las deudas son costosas. Cuanto más tiempo te demores en pagar una deuda, más dinero pagarás en intereses.

Estos consejos pueden ayudarte a comenzar a tomar el control de tus deudas.

Reducir la Deuda

Si quieres reducir tus deudas, necesitas un plan.

  • Si no tienes un presupuesto, crea uno. Este artículo te muestra cómo.

  • Busca formas de reducir tus gastos diarios de modo que tengas más dinero para abonar a tu deuda.

  • Dado que las tarjetas de crédito suelen tener tasas de interés más altas que los préstamos para viviendas y vehículos, esfuérzate por pagar la deuda de la tarjeta de crédito primero. Concéntrate en una tarjeta a la vez. Elije pagar primero la tarjeta con la tasa de interés más alta o la tarjeta con el saldo más grande. Una calculadora de pagos, como esta, puede ayudarte a determinar qué tan rápido puedes pagarlo.

  • Divide los ingresos inesperados entre ahorrar y/o reducir tus deudas.

  • A medida que pagues tus deudas, respeta tu presupuesto. No quieres agregar más deudas a tus tarjetas de crédito.

Problemas Pagando las Facturas

Si tienes problemas para pagar tus facturas, puedes llegar a sentirte abrumado. Estos son algunos de los pasos que puedes seguir.

  • Haz de tus necesidades de pago, como el alquiler, los servicios públicos y el transporte, tu máxima prioridad. Si necesitas ayuda, el artículo Búsqueda de alquiler o asistencia para la vivienda proporciona recursos.

  • Si tienes problemas para pagar tu hipoteca, habla con tu prestamista sobre las opciones que puedes tener. De lo contrario, si dejas de hacer pagos, puedes perder tu casa por ejecución hipotecaria.

  • Si tienes problemas para pagar el préstamo de tu automóvil, habla con tu prestamista. De lo contrario, el prestamista puede embargar tu automóvil.

  • Para tarjetas de crédito u otros préstamos no garantizados, habla con tus acreedores. Es posible que puedas reducir tus pagos.

Otra opción es utilizar un asesor crediticio. Un asesor de crédito puede ayudarte a hacer un presupuesto, aprender habilidades de administración de dinero y hacer un plan de administración de deudas. Estos consejos de la Comisión Federal de Comercio te ayudarán a elegir una organización de renombre.

Cobro de Deudas

Un cobrador de deudas puede comunicarse contigo si un acreedor ha dejado de intentar cobrarte. Según la Ley de Prácticas Justas de Cobro de Deudas, los cobradores de deudas no pueden utilizar prácticas abusivas, injustas o engañosas al cobrar deudas. Algunos de tus derechos bajo esta ley incluyen:

  • No pueden comunicarse contigo antes de las 8 am o después de las 9pm a menos que estés de acuerdo. Tampoco pueden comunicarse contigo en el trabajo si se les ha dicho que no puedes recibir llamadas allí.

  • Pueden llamar, enviar cartas, correos electrónicos o mensajes de texto.

  • No pueden hablar de la deuda con nadie más que contigo, tu cónyuge o tu abogado. Es posible que se comuniquen con otras personas para averiguar la dirección de tu casa, el número de teléfono de tu casa y dónde trabajas.

La Asociación Nacional de Defensores del Consumidor tiene más información sobre el cobro de deudas, incluidos varios videos sobre cómo lidiar con los cobradores de deudas.

Evita las Estafas y los Fraudes

Puede ser fácil caer en una estafa cuando te encuentras bajo estrés financiero. Evita ser una víctima tomándote tu tiempo e investigando. Estos consejos pueden ayudar.

  • Consulta cualquier establecimiento que quiera ayudarte. El Better Business Bureau o tu equivalente local pueden tener un informe sobre el negocio. Busca reseñas.

  • No pagues por adelantado. Deberías poder discutir qué servicios pueden brindarte antes de aceptar su ayuda.

  • Si se te presiona para que actúes de inmediato, detente y mira hacia otra parte.

  • Si usan tácticas de miedo, como amenazar con arrestarte, busca en otra parte.

  • No proporciones ninguna información personal o financiera hasta que los hayas examinado.

  • Si prometen una solución inmediata o fácil o un resultado rápido, busca en otra parte.

Tomar medidas para administrar y reducir tu deuda también puede ayudarte a comenzar a reducir el estrés. Y, a su vez, un menor estrés puede darte energía para emprender el proceso continuo de reducir la deuda. ¡Es un gana - gana!